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Chile produce mas celulosa

El mercado chileno de la celulosa ha crecido en los últimos años. La entrada en funcionamiento de dos nuevas unidades industriales y el aumento en las exportaciones son el reflejo del buen momento que parece tener el sector
por Vanesa Restrepo Barrientos
En los últimos años la participación chilena en el mercado de la celulosa ha aumentado sustancialmente. Con sólo dos proyectos específicos, pertenecientes a las dos principales compañías celulósicas de ese país, se aumentó la capacidad productiva en más de 1’600.000 toneladas por año. El funcionamiento de estas unidades industriales es un reflejo de la dinámica que ha adquirido el sector y que, en parte, se deben al incremento en la demanda mundial de este producto.
Con estas nuevas unidades productivas, Chile entra a competir directamente con Brasil y Uruguay, dos naciones sudamericanas que basan parte de su economía en los sectores forestal, de celulosa y papel, y que también realizan inversiones importantes para ampliar la capacidad de producción y actualizar la tecnología, con miras a reducir los costos.
Las inversiones en el sector de la celulosa continuarán en lo que resta de este año, mientras que para el 2009 se espera que la producción alcance los niveles esperados, con base en los cálculos de capacidad productiva.
Nuevas plantas Los proyectos productivos mencionados son las plantas de Nueva Aldea, propiedad de la firma Celulosa Arauco y Constitución, y Santa Fe II, perteneciente a la Compañía Manufacturera de Papel, CMPC.
La primera de ellas, Nueva Aldea, entró en funcionamiento el 31 de agosto de 2006 y cuenta con una capacidad de producción de 856.000 toneladas anuales de celulosa kraft blanqueada, derivada tanto del pino como del eucalipto, que se exportan en su totalidad, según informó el gerente de la planta, Gunars Lucks Guzmán.
De acuerdo con Lucks, el complejo de Nueva Aldea está localizado en la Provincia de Ñuble y demandó una inversión superior a los US$1.400 millones. Además de la planta de celulosa, el complejo Nueva Aldea está compuesto por un aserradero con capacidad para 450.000 m3; una planta de paneles de 225.000 m3 y una planta de trozado de capacidad de dos millones de metros cúbicos de madera. ..........
Nuevas tecnologíasLas nuevas plantas celulósicas de Chile, además de tener un tamaño representativo, tanto en infraestructura como en producción, cuentan con tecnología de punta a través de la cual se reducen costos de producción, mano de obra e impactos ambientales.
En el caso de Nueva Aldea, el gerente Gunars Lucks aseguró que la tecnología utilizada en el diseño y la gestión medioambiental de la planta “cumple con los más altos estándares mundiales e incorpora las mejores tecnologías disponibles en el mundo”.
Lucks explicó que la planta cuenta con los sistemas de captación e incineración de gases concentrados y diluidos de última generación, mientras que el efluente líquido es sometido a tratamientos primario, secundario y terciario antes de ser descargado al río Itata. “Cabe señalar que el efluente se monitorea en forma continua y el análisis de los diferentes parámetros se reportan en línea a la autoridad ambiental”, confirmó. Durante los primeros meses de operación, la planta recibió críticas y acusaciones por supuesta contaminación de aguas y emisión de gases que producían fuertes olores. Frente a ello, el gerente explicó que “la calidad de aire se monitorea también en forma continua, efectuándose análisis en diversas estaciones de muestreo, que son reportados también en línea a la autoridad ambiental”.
En el portal web de la compañía se reseñan los pleitos legales que ha tenido por cuenta de estas acusaciones, pero concluye que todos los problemas se han superado totalmente y que, como resultado de ellos, se han optimizado los procesos y controles ambientales.
De igual forma, Francis Backhouse gerente de la planta Santa Fe II, explica que allí se cuenta con torres de enfriamiento de agua, sistemas para la regulación del calor y reutilización de las aguas, en un ciclo que incluye también un proceso de generación de energía.
El gerente notifica que la planta no ha tenido problemas medioambientales y que todo el proceso productivo es evaluado por las autoridades ambientales que le han entregado certificaciones de calidad en las normas ISO 9001, ISO 14001 y OHSAS 18001, así como la Resolución de Certificación Ambiental.
De igual forma, destaca que la planta tiene un consumo de agua estimado en 24 m3 por tonelada de celulosa producida. Esta cifra representa menos de la mitad del consumo de las plantas con tecnología de los años 90, cuya demanda de agua fluctuaba alrededor de 60 m3 por tonelada. ..........Inversiones forestalesLa operación de las plantas va de la mano con la ampliación de los proyectos forestales que ambas empresas (Arauco y CMPC) desarrollan, tanto en Chile como en los países vecinos, especialmente en Brasil, Argentina y Uruguay.
En la planta Santa Fe II, según informa su gerente, se trabaja con dos tipos de eucalipto cuyos períodos de cosecha están entre los 12 y 14 años. “Nuestra madera tiene reconocidas propiedades de resistencia, y lo que queremos es repotenciar y posicionar ese valor agregado”, explicó.
En la planta Nueva Aldea se trabaja con la madera proveniente de las 700.000 hectáreas de bosque que tiene CMPC en Chile y Argentina. “La calidad de nuestras celulosas de pino y eucalipto han tenido una gran aceptación en el mercado mundial que en los dos últimos años se ha mostrado favorable para la celulosa y otros commodities”, manifiesta Gunars Lucks.